Manifestaciones de la
cultura criminal.
El
fenómeno delictivo en los últimos años, ha tenido un cambio cuantitativo y
cualitativo, la mayor incidencia se da en el delito de robo, cuyas expresiones
van en aumento al igual que secuestros, homicidios, violaciones, agresiones con
armas, extorciones, asalto, fraudes, corrupción, impunidad y también
crecimiento en la llamada cifra negra que es la cantidad incierta de delitos y
crímenes que no se reportan ante las autoridades por miedo al agresor, miedo a
que lo extorsionen, es un delito de poca importancia, pérdida de tiempo con
tramites largos y difíciles, desconfianza asía la autoridad, hostilidad por
parte de la misma o simplemente falta de pruebas para comenzar algún proceso.
La
delincuencia y la criminalidad en la que la sociedad cada vez más participa se
han convertido en una crisis reflejo de la decadencia moral e indiferencia para
erradicarla, a pesar que es un tema recurrente en las campañas electorales.
Pero más allá de los discursos políticos, las estrategias parecen no dar los
resultados esperados; pues la sensación de inseguridad y el creciente clima de violencia están en aumento. La
relación violencia-inseguridad se convirtió en la plataforma política de muchos,
pero carente de análisis, comprensión y diseño de soluciones reales frente a la
delincuencia y el creciente miedo social a la inseguridad.
En muchos
de los casos que se presentan, se ha observado que quienes cometen robos con
violencia son individuos que han utilizado el alcohol y drogas para estimularse
y cometerlos delitos, se trata además de individuos jóvenes, pero no
necesariamente menores de edad pues adultos tanto hombres como mujeres son
inducidos a cometerlos, también se advierte que estos delitos casi siempre se
cometen en grupo sobre todo los delitos con violencia, el agente infractor
directo probablemente sea uno pero casi siempre está rodeado o apoyado por
algunos otros.
Estas
conductas que se presentan con frecuencia se presentan en delitos más graves,
claro ejemplo de esto es la violencia provocada por la lucha contra la
delincuencia organizada y el narcotráfico, ya que el incremento de la violencia
forma parte del desafío que conlleva enfrentarlo a partir de la decisión
gubernamental que lo percibe como un problema de seguridad nacional pero el fracaso
de las instituciones en la lucha contra la delincuencia, en virtud de que no
hay programas de prevención social real y efectiva, sino que en una visión
estrecha sólo se enfrenta la delincuencia con represión y fuerza y poca
atención de los factores sociales, económicos o culturales para la generación
de la violencia. Aun así, el combate contra el narcotráfico se impuso como una
cuestión de primer orden en materia de seguridad, pues, no sólo se ve como un
problema de carácter individual sino por las implicaciones sociales, políticas
y económicas del tráfico y consumo de drogas en el país y el mercado mundial.
Buen aporte, saludos!!
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